“La innovación abierta, entendida como el trabajo colaborativo con partners y startups, es fundamental para generar valor” - Juan Cumbrado, director de Innovación en MAPFRE

La innovación en el ámbito insurtech está redefiniendo cómo operan las compañías aseguradoras. Ya no se trata solo de incorporar tecnología al modelo de negocio, sino de transformar la forma en que se diseñan los productos, se organizan los equipos y se responde a las necesidades actuales de las personas usuarias. 

En esta entrevista con el director de Innovación de MAPFRE, Juan Cumbrado, abordamos temas clave como las colaboraciones entre startups y grandes corporaciones, que permiten acelerar el desarrollo de soluciones, explorar nuevos enfoques y generar impacto. También reflexiona sobre los aprendizajes compartidos entre el mundo corporativo y el del emprendimiento, y sobre cómo fomentar una cultura de innovación que sea participativa, estratégica y sostenible.

Su testimonio ofrece una mirada honesta y práctica sobre cómo transformar una gran organización desde dentro, conectando con las personas y con el entorno. 

1. ¿Cómo estáis impulsando en MAPFRE la transformación digital que atraviesa en estos momentos el ecosistema emprendedor innovador?

Como director de Innovación de MAPFRE España, mi labor consiste en identificar los retos que plantean las transformaciones tecnológicas y sociales dentro del mercado asegurador, y detectar aquellas que pueden traducirse en oportunidades de mejora para nuestros servicios y productos. Este trabajo lo realizamos siempre en estrecha colaboración con los equipos de estrategia y de negocio de la compañía. 

Para lograrlo, es fundamental permanecer atento a los cambios que experimenta el sector, responder de manera proactiva y ajustarnos a las expectativas cambiantes de nuestra clientela, ya que todo cambio trae consigo formas de consumir distintas. A esto se suma el deseo de anticiparnos a la demanda de las generaciones futuras, otro foco primordial.

Para nosotros, la innovación es el motor que impulsa esta evolución, y creemos que así debe ser en el mundo corporativo en general. La capacidad de una empresa para enfrentarse a los cambios frenéticos es un factor crítico para su competitividad y relevancia en el sector. Se trata de promover una mentalidad abierta al cambio, donde la colaboración y el aprendizaje constante sean parte integral del día a día. Solo así, podremos apostar por el crecimiento, la eficiencia y la evolución de la compañía. En nuestro caso, queremos seguir fomentando una cultura de innovación que se entienda como un principio fundamental, imperativo y necesario.

2. ¿Cómo ha evolucionado el sector insurtech en los últimos años para adaptarse a las nuevas demandas del mercado y qué papel juega la innovación abierta en vuestra estrategia?

La manera que tenemos en MAPFRE de adaptarnos a las demandas del mercado es a través de la reinvención de nuestra oferta aseguradora: avanzamos en paralelo a la transformación digital y social, traduciendo las necesidades de la población en nuevos productos y servicios. La sociedad actual se define por prestar especial atención al dato y por una necesidad de eficacia y rapidez. Esto mismo es lo que tenemos en cuenta a la hora de trabajar e idear proyectos nuevos, velando siempre por ofrecer la máxima calidad. Por ejemplo, uno de nuestros objetivos en este sentido es que queremos ser líderes en la gestión de siniestros, de manera que sea un proceso lo más automatizado, eficaz y exacto posible. Asimismo, tenemos muy en cuenta los principios de humanidad, sostenibilidad y, por supuesto, innovación.

En definitiva, esto nos lleva a resumir esta etapa evolutiva en tres pilares fundamentales: la digitalización de productos y servicios, la orientación hacia una experiencia de cliente más personalizada, y la construcción de un modelo de negocio ágil y sostenible. Para lograrlo, el mayor aprendizaje que extraemos de este proceso es que la innovación es un “continuum”, es decir, lejos de ser la meta, es la mentalidad que guía el trabajo.

3. ¿Qué papel juegan las alianzas entre startups y corporaciones en el sector insurtech?

El sector de los seguros, o insurtech es intrínsecamente colaborativo, dada su naturaleza transversal. De hecho, la solidez de las alianzas contribuye a la solidez de toda empresa. Permiten explorar posibilidades de manera intersectorial, así como distintos perfiles y necesidades, enriqueciendo nuestra relación con la clientela y dinamizando nuestra propia operativa.

Entendemos que la innovación es una de las grandes palancas de diferenciación para ser relevantes en el panorama interno y externo. Consideramos que la innovación abierta, entendida como el trabajo colaborativo con partners y startups, es fundamental para generar valor: es una oportunidad para ampliar nuestra gama de productos y servicios, posicionarnos a nivel empresarial, fomentar los valores compartidos o conocer nuevas herramientas y potenciar su uso.

4. ¿Cuáles son los principales aprendizajes que las grandes corporaciones pueden extraer del mundo emprendedor y viceversa?

Dentro de las numerosas estrategias de innovación, llevamos años testando muchas de ellas para ver cuáles se adaptan mejor a las necesidades de la compañía y de las personas empleadas que, al fin y al cabo, son quienes deben liderar esa cultura de transformación continua. Este testeo es constante, es decir, lo que a lo mejor en 2018 no funcionó cuando iniciamos la andadura del primer modelo de innovación, puede que ahora sí lo haga, y debemos tenerlo en cuenta. Esta mentalidad de experimentación y adaptabilidad es algo que las grandes corporaciones aprendemos del mundo emprendedor: la capacidad de pivotar, de probar rápido y de no tener miedo al error como parte del proceso de aprendizaje.

En este contexto, las corporaciones aportamos al ecosistema emprendedor la visión estratégica, la solidez y la experiencia en gestión a gran escala. Cabe destacar la importancia de la relación cercana y directa con negocio, tecnología y operaciones. Para que la cultura de la transformación cale, es fundamental que estemos totalmente alineados y rememos hacia una misma dirección. Solo así, las iniciativas tendrán un impacto estratégico, cumpliendo los objetivos de los proyectos y de negocio. Esta capacidad de coordinación entre diferentes áreas y la visión de largo plazo son aprendizajes que las startups pueden extraer de las grandes organizaciones.

No hay cultura de la innovación sin intraemprendimiento. Del mundo emprendedor hemos aprendido que es fundamental impulsar que las personas trabajadoras desarrollen proyectos con mentalidad startup dentro de la organización. En España, tenemos el programa PATIO, un programa de aceleración en Transformación, Innovación y Oportunidades de Negocio. Se trata de un framework de trabajo que busca maximizar la innovación mediante la creatividad y la colaboración de las personas que participan en él. Es un marco profesional que asegura resultados tangibles y que incentiva que las personas presenten iniciativas que ayuden a solventar los desafíos internos y externos que tenemos por delante.

5. ¿Cómo gestionáis internamente la cultura de innovación para que convivan los modelos tradicionales con las nuevas formas de trabajo que aporta el ecosistema emprendedor?

En MAPFRE lo abordamos considerando como base de todo a las personas. Para que acepten, impulsen y comprendan la transformación, esta debe formar, como decíamos, parte de su cultura de trabajo. Por ello, fomentamos planes de evolución tecnológica, digitalización, autogestión y reorganización operativa. Uno de los fundamentos de nuestra filosofía es que somos una empresa en constante aprendizaje, lo que nos permite tener en mente esa búsqueda por la innovación. Cuando los equipos perciben que forman parte natural de la cultura de la compañía, la adoptan como algo propio y no como una imposición externa.

Asimismo, desde MAPFRE priorizamos la comunicación directa con la plantilla como principal canal para transmitir los cambios que realizamos a nivel interno. Explicar los motivos que nos llevan a tomar ciertas decisiones, así como sus aplicaciones reales y el impacto positivo que tendrán, tanto para quienes forman parte de la organización como para la clientela, fomenta un buen ambiente de trabajo.

En última instancia, cada vez que impulsamos una iniciativa de cualquier tipo, damos a los equipos las herramientas, el conocimiento y el acompañamiento adecuados para que se sientan preparados en su adopción. Es vital que todas las personas que forman MAPFRE cuenten con un propósito común y con los medios para liderar activamente la transformación.

6. ¿Qué consejos darías a las personas emprendedoras y las empresas que buscan establecer colaboraciones estratégicas con grandes corporaciones como MAPFRE?

Más allá de consejos, creemos que lo importante es tener claras las prioridades que guían la implantación de una transformación digital y/o cultural. En nuestro caso, trabajamos con el foco puesto en las personas, donde tenemos en cuenta a los equipos de MAPFRE, a las personas colaboradoras, y por supuesto, a la clientela. Para generar cambios con verdadero valor, tenemos que escuchar las necesidades y expectativas de todas las personas de la que nos rodeamos. Solo así, podremos saber qué tipo de productos o servicios debemos impulsar, la velocidad con la que podemos implantarlos, los desafíos que plantean y las soluciones que podemos darles. Todos esto son criterios esenciales y parten del mismo punto.

Cabe, además, destacar que avanzar en paralelo consolida la transparencia y confianza de la empresa, otro punto primordial en este proceso. La evolución tecnológica, social y cultural necesita de un grupo que la comprenda, la comparta y la extienda.

7. ¿Qué valor aportan iniciativas públicas como la Plataforma ONE para facilitar la colaboración entre grandes corporaciones y el ecosistema emprendedor?

Mucho. Iniciativas como la Plataforma ONE facilitan el proceso de colaboración, lo que resulta esencial para tomar una perspectiva global y lograr, en consecuencia, un alcance de actuación mayor, tal como hemos estado comentando. Permiten la generación de sinergias y el desarrollo de soluciones innovadoras que difícilmente podrían surgir de forma independiente. Y, asimismo, contribuyen al fortalecimiento del tejido empresarial y al desarrollo económico y social en su conjunto.